Sigue las noticias del cónclave y descubre los entresijos de esta tradición secular.
Durante la misa solemne que marca la inauguración de un nuevo pontificado, el Sumo Pontífice recibe dos insignias mayores que simbolizan su autoridad espiritual y su misión pastoral universal: el **palio** y el **anillo del pescador**. Estos ornamentos litúrgicos no son simples decoraciones protocolarias, sino la expresión visible de una tradición bimilenaria y de una teología profunda de la sucesión apostólica.
El nuevo Papa León XIV, elegido el 8 de mayo de 2025 con el nombre de Robert Francis Prevost, ha revelado su visión y programa pontificio durante su primer encuentro con el Colegio Cardenalicio el 10 de mayo. Primer pontífice estadounidense de la historia, ha elegido un nombre cargado de significado que revela mucho sobre la orientación que pretende dar a su pontificado
El humo blanco que se elevó sobre la Capilla Sixtina el 8 de mayo de 2025 a las 18:07 marcó el final de un cónclave notablemente breve. En solo 24 horas y cuatro rondas de votación, los 133 cardenales electores eligieron al cardenal estadounidense Robert Francis Prevost como el 267º papa de la Iglesia Católica. Esta rápida elección oculta, sin embargo, intensas negociaciones y alianzas estratégicas que merecen ser analizadas.
El sol apenas se levantaba sobre la Ciudad del Vaticano este viernes 9 de mayo de 2025, cuando ya se palpaba la efervescencia en las callejuelas empedradas que rodean la Plaza de San Pedro. Fieles y turistas se apresuraban para vislumbrar el balcón desde donde León XIV se había presentado al mundo el día anterior. Esta jornada marca el verdadero inicio del pontificado del 267º sucesor de San Pedro, primer papa estadounidense en la historia de la Iglesia católica
El humo blanco se elevó este jueves 8 de mayo a las 18:07 sobre la Capilla Sixtina, anunciando al mundo que los 133 cardenales electores habían elegido a un nuevo sucesor de San Pedro. Pocos minutos después, el cardenal Dominique Mamberti proclamó desde el balcón de la Basílica de San Pedro la fórmula tradicional: "Habemus Papam" – "Tenemos Papa". La elección del cónclave recayó en el cardenal estadounidense Robert Francis Prevost, quien tomó el nombre de León XIV, convirtiéndose así en el 267º papa de la Iglesia Católica.
El miércoles 7 de mayo de 2025 quedará grabado como el día en que la Iglesia católica se retiró una vez más al silencio de la Capilla Sixtina para confiar al discernimiento de sus cardenales una de las responsabilidades más pesadas: elegir al sucesor de Pedro. Dos semanas después del fallecimiento del papa Francisco, 133 cardenales electores iniciaron el cónclave en una atmósfera de gravedad espiritual, fervor popular y extrema confidencialidad.
En vísperas de la apertura del cónclave destinado a elegir al sucesor del papa Francisco, Roma vivió una jornada intensa marcada por rituales solemnes, tensiones diplomáticas y controversias reveladoras. Esta jornada del 6 de mayo de 2025 se inscribe como un momento crucial en la historia reciente de la Iglesia católica, reflejando tanto la unidad deseada como las profundas divisiones que atraviesan el colegio cardenalicio.
El 5 de mayo de 2025, a dos días de la apertura del cónclave destinado a elegir al sucesor del papa Francisco, el Vaticano vivió una jornada de intensa actividad. Entre reuniones cardenalicias, preparativos logísticos y juramentos solemnes, esta jornada constituyó una etapa decisiva en la transición hacia un nuevo pontificado.
En el corazón del misterio del cónclave, ese ritual sagrado mediante el cual la Iglesia católica designa a un nuevo soberano pontífice, se esconde una serie de gestos silenciosos, signos discretos, indicios imperceptibles para los profanos, pero cargados de significado para los iniciados. Entre estos gestos figura una acción singular, raramente observada pero que, cuando ocurre, suscita la atención de los vaticanistas y conocedores: la del cardenal electo que, en el instante siguiente a su aceptación del ministerio petrino, se quita su solideo rojo —llamado zucchetto— para ofrecerlo al secretario del cónclave.
El cardenalato, institución central de la Iglesia católica, suscita un interés renovado con ocasión del cónclave de 2025, particularmente debido a la participación del cardenal Timothy Radcliffe, sacerdote dominico no obispo. Esta situación ofrece una oportunidad para explorar en profundidad las condiciones de acceso al cardenalato, los títulos asociados, las obligaciones episcopales, así como los precedentes históricos de cardenales y papas no obispos.